Conocer a… cabo Martínez

Una influencer de moda

La red social Instagram se ha convertido en todo un reclamo para influencers. Estos perfiles están especializados en una temática concreta y son muchos los que siguen sus pasos e imitan las tendencias. Sin embargo, detrás de cada publicación o de cada story hay un trabajo de fondo y de forma para llegar a los miles de seguidores.

Aunque la cabo Martínez viste a diario el uniforme militar en la Unidad de Servicios de Base “El Goloso”, cuando sale del trabajo su vida cambia por completo y se dedica a alimentar a los aproximadamente 22.000 seguidores, principalmente mujeres, que siguen su perfil.

Ella, a sus 41 años, marca un estilo propio, diferente. Sus publicaciones están orientadas a la moda y despierta tendencias entre sus seguidoras. «Intento reflejarme como soy realmente, de una forma natural», dice.

De pequeña, en el barrio, ya la llamaban Punky Brewster, por su llamativa forma de vestir, al igual que el personaje televisivo. De hecho le gustaba mirar a su madre cuando se arreglaba, y confiesa que a menudo le cogía la ropa y se la ponía.

 

cabo Martínez

Aunque la cabo Martínez viste a diario el uniforme militar en la Unidad de Servicios de Base “El Goloso”, cuando sale del trabajo su vida cambia por completo y se dedica a alimentar a los aproximadamente 22.000 seguidores, principalmente mujeres, que siguen su perfil.

Ella, a sus 41 años, marca un estilo propio, diferente. Sus publicaciones están orientadas a la moda y despierta tendencias entre sus seguidoras. «Intento reflejarme como soy realmente, de una forma natural», dice.

De pequeña, en el barrio, ya la llamaban Punky Brewster, por su llamativa forma de vestir, al igual que el personaje televisivo. De hecho le gustaba mirar a su madre cuando se arreglaba, y confiesa que a menudo le cogía la ropa y se la ponía.

Ahora, las nuevas tecnologías, le han dado otras posibilidades. Cada día sube, aproximadamente, tres publicaciones a Instagram. Explica que es muy importante cargarlas a unas horas muy determinadas, para que los impactos sean mayores.

Pero, detrás de cada una de ellas, hay un trabajo que implica buscar la combinación acertada de la ropa y los complementos o seleccionar el escenario adecuado y la persona que va a realizar la fotografía. «Normalmente me las hace mi hija, de 19 años, o algún amigo», asevera.

Al día puede pasar cinco horas en Instagram, a lo que habría que añadir el tiempo que tarda en preparar el material para alimentar la red social. «Es como un reality, siempre tienes que estar ahí», manifiesta.

También es muy importante mantener la interacción con los usuarios. Es consciente de ello, así como de la ayuda que puede prestar a aquellas personas que se sienten solas. Además del contenido de sus publicaciones, remarca que las stories llegan a más público y tienen gran importancia en la red social. En respuesta a ellas, contactan con la cabo Martínez mujeres maltratadas, personas que han sufrido bullying y otras que necesitan su ayuda. «Para ellas, a veces, es más sencillo dirigirse a mí porque me ven como una amiga», explica. Trata de escucharlas y ayudarlas en la medida de lo posible.

Por otra parte, son muchas las que le preguntan sobre cómo realizar una combinación de ropa acertada para eventos o celebraciones y le piden consejo. Ella intenta orientarles y les aconseja sobre cómo combinar las prendas.

Lleva con el outfit (vestimenta) militar desde 1998. Tras haber pasado por diferentes uniformidades, incluida la de Regulares en Ceuta, ha llegado a la conclusión de que le gusta tal y como es, y no la cambiaría.

La cabo Martínez ha logrado, de forma autodidacta, posicionarse en Instagram y que muchas mujeres sigan su ejemplo. Se siente orgullosa de haber encontrado un lugar propio en la red social, una ventana en la que le sigue una comunidad de followers dispuestos a estar a la moda. Este espacio tiene un mensaje común love yourself, o quiérete a ti mismo, como se traduciría en castellano.

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